Las cuevas son frecuentes en los montes calizos. La que aparece en la fotografía es una cueva situada en un monte murciano. Esta cueva es desconocida actualmente, dudo que alguien aparte de mí la visite alguna vez al cabo del año.Es mi cueva.
Hace muchos años constituyó un refugio para los pastores, como lo atestiguan, a la entrada, restos de antiguas fogatas encendidas para preservarse de los fríos invernales.
La entrada de la cueva es un agujero en el monte. Al introducirte en él hay una pequeña cámara que comunica, a través de un estrecho corredor, con otra cámara más amplia situada a mayor profundidad. En esta oscura cámara profunda hay dos columnas de unos
Al salir al exterior, una vez reconfortado, veo unas gotitas de agua impregnadas de cal suspendidas del techo del corredor. Son como lágrimas de despedida nostálgica. Pero tú sabes que no pasarán dos meses sin que vuelva a buscarte, y a encontrarte, y a descansar, refrescarme y hallar la paz en tu silencioso útero, y a contarte cosas sin hablar. Te quiero, preciosa.
(Foto: las estalactitas de la cueva de Mayrena)
emocionante aunque ya lo huubiera leído...
ResponderEliminarY me trae muy buenos recuerdos