lunes, 23 de febrero de 2009

Juan

Manos callosas expresivas, ojos pequeños color cielo, surcos labrados en el rostro por mil soles y mil vientos, Juan me habla, con la sabiduría que dan cincuenta años de contacto directo con el campo, de cornejales, de tempero, de nevazos, de fumigaciones, de tahúllas, de aperos, de albercoqueros, de escarda, de parás, de fanegas, de jornales, de azaones, de las helás, de las calores, de aciecas, de majencas, de caneos, de juma…. palabras y costumbres casi olvidadas que es un privilegio recordar contigo, Juan.

Con este texto quiero rendir un humilde tributo a todos los juanes que pasan su vida trabajando en el campo sin más reloj que el que marca el instante de la salida y de la puesta del sol, sin más afán que ver cómo surge cada primavera del suelo húmedo un brotecico tierno, o un borrón rojizo de la rama del almendro, sin más temor que arruinen la cosecha los hielos tempraneros o los pedriscos tardíos.

(Foto: Juan en Mayrena)

9 comentarios:

  1. Vaya, el Juan este podría ser perfectamente de mi tierra (lo mismo lo es)... yo también conozco algunos juanes como él, que trabajan de sol a sol, en sus bancales, en sus cabricas, en sus borreguicos... y que ponen todo su cariño y esfuerzo en sacar día tras día una plantación o unos animales adelante.

    Eso sí que es dedicación y no la que tenemos otros en nuestros trabajos.

    1 abrazo (feo). :P

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  2. Pues yo tambien estoy encantado de unirme a ese tributo a los juanes de España, hombres rudos pero buenos hombres, que en la mayoría de los casos no han salido nunca de su pueblo, pero albergan mucha sabiduria popular y da gusto hablar con ellos.
    Saludos.

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  3. Zoldar, Juan tiene cara (aunque se la he cortado por discreción), existe, es de tu tierra y vive cerca de tu casa. Igual hasta lo conoces...

    Tetealca, lo mejor de Juan es precisamente esa sabiduría forjada entre soledades y terrones de tierra. Y su mirada limpísima. La pena es que tipos así son una especie en extinción...

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  4. Pues como tú, que también estás en extinción...

    He conocido algunos juanes, el más grande de todos, mi padre. Y ha sido un privilegio corretear, brincar y vivir entre brasás de alfalfa, terrones, ababoles y serriche... y él ahí está aún, con los mismos surcos en la cara y sus manos ásperas, sus pies con uñas de hierro y sus cejas pobladas tapando el sol a esos ojos pequeños como los de Juan.

    Dieguito, que semos del campo.

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  5. Esos Juanes.......viejos campesinos, como esas chozas chiquitas que paran con cuatro estacas, pero que ni dios arranca, son las vidas de los viejos.

    Se amojonan en la tierra y dejan pasar los años, como nubes por arriba.

    Envejecer, para ellos, es arraigarse, sentirse cada vez más invadidos por el polvo, trepados por las malezas.

    Vejez de tierra y de árboles. Por eso que quieren tanto sus campos. Son sus almas, el alimento de su espiritu.
    Pardo y triste, son igual a ellos: sufrido y resistidor, nada más. Ni una sola perspectiva de remonte hacia la altura. Ni un ala; puras raices.

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  6. Canela, semos, semos de campo, pero yo tengo la extinción más cerca que tú.

    María Jesús, ahora tú eres más de campo que yo, yo lo añoro, tú lo tienes en la mano.

    Anónimo, has descrito muy bien a todos los juanes del mundo ¿Dónde te busco?

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  7. Juan, los albercoqueros, la cieca, las guinchas, los caballones... me han preguntado por ti antier, les extrañaba no verte asomar en tu moto al despuntar el día. Les he mentido que te has quedado azurronao en la cama, comiéndome las lágrimas, que llegarías luego a luego. No saben que ya nunca vas a volver a cuidarlos, no saben que la puta muerte te ha llevado de sopetón esa misma madrugada, a los diez días de escribirte este mensaje. Rabia, impotencia, desafío... ¿Por qué no te atreves conmigo, desgraciada? ¿Me tienes miedo, cabrona?

    Juan, tu recuerdo queda impregnando cada terrón de Mayrena...

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  8. Esto lo leí en otro lugar y te he oido tu cariño hacia Juan muchas veces, tu dolor y pena cuando se fué...

    y también me dijistes una vez que puede que haya otra dimensión...los volveremos a encontrar? volveremos a encontrar a los que tanto quisimos y queremos?

    He seguido leyendo

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