No lo sabes, pero
eres poesía líquida, libre,
verso sin tiempo ni medida,
fluyes,
aile de pleine lune qui frôle ma joue,
sin idioma, sin regla,
sin frontera.
No dejes que te opriman
los barrotes del dolor,
vuela sin buscar mañanas,
como siempre lo hiciste,
sin rumbo,
y si un día caes al suelo
herida, llámame
para que te impulsen dos palabras.
Te necesito.
Viva.
Te necesito.
Libre.
(Foto: tarabilla sobre cerramiento en las dunas de San Pedro)
Hola!
ResponderEliminarDiego, qué bonita.. gracias por estas palabras tan llenas de aire :)
Besos :)
Precioso, Diego (el poema y el pájaro)
ResponderEliminarÉl tampoco lo sabe (aunque tú no lo sepassssssssss de Quique González) pero los versos que más me gustan son como esos, los de sin tiempo ni medida, los capaces de volar libres de ataduras...
ResponderEliminarY ellos, los pájaros, son los que mejor los conocen.
Un beso.
Me gusta...
ResponderEliminarEl martes iré a San Pedro a ver si tu tarabilla sigue allí.
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Aire, pájaro, volar libres de ataduras, tu tarabilla.
ResponderEliminarAy, jo...r, que ganas de llorar.
ResponderEliminar(el herrerillo)