Muchos caminos no son sino una sucesión de huidas: huidas de la rutina alternando con huidas de la misma huida de ella. Y cambiar de aire siempre viene bien. Mejor esto que quedarse sentado. Buen viaje pero vuelve ¿vale? Un beso caminando.
Muy bueno, Diego. La autovía utopía que quiso ser camino entre montañas :) O quizás en esas montañas vive el presidente de "algo" y hubo que hacerle ese desvío para acercarle la autovía a su casa :)
Pues por aquí ha habido muchos peones camineros huyendo de la rutina, porque hay curvas innecesarias -y no tan acertadas como las tuyas- por todas partes. Muy bueno tu dibujo Diego, cada cual juega con lo que tiene a mano para hacer cada día diferente. Un abrazo
Tá bien eso de carretera y manta. O pieses y manta. O bicicleta y manta. O autobús y manta. O avión y manta. O lo mejor, tren y manta para acercarnos a lo que queremos. Deíme lo mismo mientras sirva pa salir de las rutinarias cotidianeidades en las que, aunque no nos guste, a veces nos sumergimos.
Mariajesús, en cualquier momento me presento en Paradela a probar tus croquetas o tu ¿xa te vín? y comprobar que no son nada rutinarios :)
Buena interpretación, Esther, la carretera puede haber sido desviada a propósito para que pase por delante del chalé de un Importante, que los Importantes no gustan de mancharse de tierra los zapatos ni andar en bicicleta, ¡qué ordinariez!
Clara, a ti te sobra el asfalto, eres caminante de senderos, mochilas y laderas. Y ríos, como se ve en tu avatar :) Preciosa afición.
Sara, me quedo con bicicleta y... tienda de campaña. Aunque lo del tren-mantero-que-te-acerca-a-no-sé-qué-quién tampoco está mal.
Darío, he descubierto a Neuman hace poco (medio vuestro, medio nuestro, aunque seguro que no es de nadie) y se ha convertido en mi autor preferido. Sencillamente, me chifla su estilo. Abrazote.
Con el royito de la rutina no paras Diego, hoy en Caravaca, mañana allí, pasado no se donde. Me recuerda la antigua carretera Caravaca-Murcia. Un abrazo
Lo malo es que, por mirar esas montañas, no "negocié" la curva y me quede varado en la arena. Sin móvil, tres días....., hasta que pasó un camión. (Y mi pregunta es: ¿quién se forró por desviar la carretera?.).
Pues mira, yo me quedaba por ahí perdida a la espera de un camión, o una bici con un buen mozo montado en ella, y mientras a disfrutar de las montañas, el cielo y lo que las rodea, lo mismo así practicaba la escalada :)
Dí que sí... seguro que sabes que así se navega a vela: en zig zag (trasluchando que le llaman) porque en el mar, el camino más corto nunca es en línea recta :)
Muchos caminos no son sino una sucesión de huidas: huidas de la rutina alternando con huidas de la misma huida de ella.
ResponderEliminarY cambiar de aire siempre viene bien. Mejor esto que quedarse sentado.
Buen viaje pero vuelve ¿vale?
Un beso caminando.
La rutina no está en lo que hacemos sino en cómo lo hacemos. La rutina está en nuestra cabeza.
ResponderEliminarEso creo.
Muy bueno, Diego. La autovía utopía que quiso ser camino entre montañas :) O quizás en esas montañas vive el presidente de "algo" y hubo que hacerle ese desvío para acercarle la autovía a su casa :)
ResponderEliminarPues por aquí ha habido muchos peones camineros huyendo de la rutina, porque hay curvas innecesarias -y no tan acertadas como las tuyas- por todas partes.
ResponderEliminarMuy bueno tu dibujo Diego, cada cual juega con lo que tiene a mano para hacer cada día diferente.
Un abrazo
Tá bien eso de carretera y manta.
ResponderEliminarO pieses y manta.
O bicicleta y manta.
O autobús y manta.
O avión y manta.
O lo mejor, tren y manta para acercarnos a lo que queremos.
Deíme lo mismo mientras sirva pa salir de las rutinarias cotidianeidades en las que, aunque no nos guste, a veces nos sumergimos.
Besito nada acostumbrado a la rutina.
Como leí en un libro de Neuman, quieto o moviéndose, cada cual viaja a su manera... Un abrazo.
ResponderEliminarSucesión de huídas, Fram. Algún día no volveré.
ResponderEliminarMariajesús, en cualquier momento me presento en Paradela a probar tus croquetas o tu ¿xa te vín? y comprobar que no son nada rutinarios :)
Buena interpretación, Esther, la carretera puede haber sido desviada a propósito para que pase por delante del chalé de un Importante, que los Importantes no gustan de mancharse de tierra los zapatos ni andar en bicicleta, ¡qué ordinariez!
Clara, a ti te sobra el asfalto, eres caminante de senderos, mochilas y laderas. Y ríos, como se ve en tu avatar :) Preciosa afición.
Sara, me quedo con bicicleta y... tienda de campaña. Aunque lo del tren-mantero-que-te-acerca-a-no-sé-qué-quién tampoco está mal.
Darío, he descubierto a Neuman hace poco (medio vuestro, medio nuestro, aunque seguro que no es de nadie) y se ha convertido en mi autor preferido. Sencillamente, me chifla su estilo. Abrazote.
Con el royito de la rutina no paras Diego, hoy en Caravaca, mañana allí, pasado no se donde.
ResponderEliminarMe recuerda la antigua carretera Caravaca-Murcia.
Un abrazo
Lo malo es que, por mirar esas montañas, no "negocié" la curva y me quede varado en la arena.
ResponderEliminarSin móvil, tres días....., hasta que pasó un camión.
(Y mi pregunta es: ¿quién se forró por desviar la carretera?.).
Hola!
ResponderEliminarPues mira, yo me quedaba por ahí perdida a la espera de un camión, o una bici con un buen mozo montado en ella, y mientras a disfrutar de las montañas, el cielo y lo que las rodea, lo mismo así practicaba la escalada :)
Un beso perdido y nada rutinario, Diego :)
Besos a los demás :)
Dí que sí... seguro que sabes que así se navega a vela: en zig zag (trasluchando que le llaman) porque en el mar, el camino más corto nunca es en línea recta :)
ResponderEliminarbeso(s)
Yo sólo huyo de las rutinas impuestas, pero no de aquellas que yo elijo. :)
ResponderEliminarSaludos.
Sí, Tetealca, o el antiguo "Caracolico"
ResponderEliminarPedrice, alguien se forró, sin duda. Ya se sabe, el 3%...
Ana, siempre tan Ana :) Ahí tendrías un buen terreno para escalar, tu nueva pasión.
Mariluz, yo siempre digo que el camino más corto entre dos puntos es la línea recta, pero también el más aburrido. Trasluchemos, trasluchemos.
Ignacio, las rutinas elegidas no son rutinas siempre que les saques tanta satisfacción como a las no rutinas (véase Paradeliña) :)
Bueno, yo entiendo que una rutina es algo que hacemos sistemáticamente, independientemente de si es elegido o impuesto. :)
ResponderEliminarSaludos.
Es que mucha recta es aburrido. Y mucha curva, ídem.
ResponderEliminarY tus ideas sí que no son rutinarias, no, mi niño, no!